Intrascendente VeroniKa

El Sábado me emborraché.
No lo tenía previsto. No dije "esta noche me emborracho", solo se dio. Las circunstancias se dieron para que me bajara no sé cuántas copas de vino.... No tenía nada que olvidar, ni tampoco un amor que llorar. No tenía nostalgia de nada, ni necesidad de nada.No había motivo para celebrar y me tomé todo el vino que pude. Y odio la borrachera, y mas si es de vino. Y mas si no termina en sexo. Es como una novela triste o de final abierto que te cagas en su puta madre.
Lo único bueno que saco de las borracheras es que me entra una filosofía y una fluidez de palabras digna de ser grabada que obviamente, después no recuerdo ni la cuarta parte.
Cuando uno está borracho se ofende por cualquier cosa, o se enamora de las farolas. O todo te parece una mierda, o el mundo es tan fantástico que merece la pena estar vivo. Pero cuando llegas a casa, vomitas. Vomitas todo lo que puedes porque la cama da vueltas, el suelo se mueve y los pies pesan. Y te abrazas al inodoro y piensas "nunca mas".
Y si al otro día trabajas, como es mi caso, ya quiere morirte del todo.

- Oye, perdona que el otro día no me acerqué a saludarte...
- cuándo?
- el Viernes por la noche ... estabas muy ocupado.
- Ah si...te vi, pero pasaste de mi, es verdad....
- es que estabas muy ocupado....sobre todo con el tenedor (risas tontas)
- si, es verdad que estabas ahí, pero no me saludaste.
- es que no me gusta meterme en donde no me llaman... si me llamas, me meto ...

Palo y a la bolsa.Pensé.
Pero el lado masculino que me sale a veces para tirar los tejos no siempre funciona.

En fin, lo bueno de cocinarte para vos mismo, es que como es en mi caso ahora mismo, me ha quedado todo sin sal...y no me he podido quejar. Me lo comí igual. Y lavaré los platos y dejaré todo impecable para que cuando llegue esta noche piense en lo bien que hago todo.
Lo bueno de dormir solo, es que solo se desarma una parte de la cama, de la mesa, del sofá, del cerebro, de la vida, del corazón...