a darme tus pies y canto
tu silencio y sueño
a darme todas esas cosas
que dicen y cuentan las malas lenguas
las viejas madres
las vivas mujeres que parieron mas vida.
(Vientre seco y cansado de quererte)
Estás en mente
en el deseo
en el cuento chino
en la leyenda fértil
en el medio del miedo estéril.
Y si aún amas así, a qué viene esa desdicha en tus pupilas con rastros lentos de caracol en una mirada perdida.
ResponderEliminarDime si sobre tu corazón circunvalan mariposas del invierno.
Me acercaría a ti, para sentir tu calor, para quitarme el miedo.
A veces pienso que en tu interior vuelan seres que no encuentran la salida, tan llenos de vueltas.
Tengo una vena aquí, que es como un surco, no sé dónde acaba.
Ven conmigo. Hay un camino, con gente crucificada a los lados.
¡¡¡VeK!!!
ResponderEliminarEntre tu entrada y el comentario de Kenit, me ha parecido estar viviendo, sentado en el palco de cualquier teatro, un acto de una obra con sabor a poco y deseo de mucho más.
Cariños cariñosos para ti, querida amiga.
El miedo esteriliza, es muy cierto. Y hay que animarse, se pierde, se gana, se vive, se crece, se siente de maravillas, se siente acorralamiento....no deja de ser la paradójica circunstancia de vivir. Pero uno a veces se pregunta qué carajo hago con tanto amor...Besos, lo has expuesto con suma belleza.
ResponderEliminarQué venga, de todas las formas imposibles, o posibles.
ResponderEliminarQue se te ha despertado el instinto de golpe??? :)))
ResponderEliminarBesazos enormes
está...entonces tiene que venir, a como dé lugar.
ResponderEliminarabrazo*
Fuerza natural, ya es anuncio...
ResponderEliminarReitero. Noya ha dicho todo.
ResponderEliminarSiempre la esperanza de algo nuevo...
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