viernes, 22 de julio de 2011

los juegos

El procedimiento parecía funcionar siempre mejor a la hora de la siesta. Veronika salía desde la esquina a timbrar a la casa de al lado, la de Natalia. Simultaneamente de la tercera casa salía Carola para llegar a la otra esquina y timbrar a Laura. Así eran las tardes de verano en aquel barrio de asfalto y pequeñas parcelas de margaritas y rayitos de sol.
Como era costumbre Veronika proponía el juego, siempre le gustó dar órdenes, las otras solo tenían que acatar. Podríamos jugar a las mamás sin papás, a la oficina con papeles viejos de papá, a la heladería inventando el "bañado en chocolate" con barro, o sino directamente a la cocinitas empanando los filetes de papel con arena de los jardines. Podíamos jugar a todo eso, pero era la hora de la siesta y no podíamos hacer mucho ruido, así que los juegos se limitaban a sentarnos en la sombrita y mirar a los colectivos pasar.


- A mi me gusta Diego.
- No! A mi me gusta Diego también!
- Y entonces? mira que me pongo celosa eh? Y a vos?
- A mi me gusta Pablo
- Me encanta Pablo!
- Ay! a nosotras dos nos gusta Diego y a ellas dos, les gusta Pablo.

El procedimiento parecía funcionar siempre mejor a la hora de la siesta. Pablo pasaba a buscar a Diego y después de caminar un buen rato se internaban en el terreno baldío y entre matorrales y hierbajos, escarabajos y hormigas se descubrían, se observaban, se miraban y se besaban.

19 comentarios:

  1. Vaya...
    También es mala suerte.

    Besos.

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  2. Me ha recordado a mi adolescencia, cuánto la echo de menos y con qué poco éramos felices.
    Besos y buen fin de semana.

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  3. Bello relato, me ha gustado mucho. Y las niñas sólo mirando, qué desperdicio para ellas...¿Se les habrá hecho costumbre?

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  4. Eso digo yo, también es mala suerte :)

    Un saludo.

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  5. Diego y Pablo tenían sus propios juegos.

    Encantada de conocerte,
    Salomé.

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  6. a jugar...



    bueno no siempre que juegas a médicos de pequeños, eres médico de mayor....

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  7. Muy lindo relato, ellas debieron sospecharlo, me parece...

    Beso grande

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  8. Yo soy la chica a la cual le agrada "Pablo"... You know POP *
    Shhh...

    Un beso o 2 #

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  9. Al final, Carolo les puso la inyección, jugando a médicos; no sé, digo!

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  10. Resultó que a Pablo también le gustaba Diego y viceversa... Pena de amores no correspondidos.
    Besos

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  11. Hay que saber jugar... ah, yo no se.

    Siempre suyo
    Un completo gilipollas

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  12. Te devuelvo la visita y me encuentro con un blog muy divertido, alegre y agresor.

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  13. Mierda, las sorpresitas son parte del juego...

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  14. Es que a la hora de la siesta se funciona estupendamente jajajaja

    Saludos y un saludo.

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  15. LINDO RELATO ME REMONTÓ A MI INFANCIA SIN EL FINAL JAJAJAJA NO TENÍA VECINOS TAN LINDOS PERO SI RECUERDO HABER SIDO NOVIA DE MI AMIGO DE JUEGOS EH IR A TOMAR UN HELADO.

    SALUDOS

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  16. Yo de pequeño jugaba a elegir color y ver los coches que pasaban. PEro no con Pablo, con Emilio... pero sin los gustos de Pablo, bien sabe dios...jejeje! Besotes!!!

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  17. Muy bueno lo suyo, que fue inesperado no cabe dudas.

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Ahora tu...